Uruguay rechaza intento en OEA de legitimar uso de fuerza para derrocar gobierno sudamericano

El gobierno de Uruguay rechazó el respaldo de algunos países miembros de la Organización de Estados Americanos (OEA) a la convocatoria al Tratado Interamericano de Asistencia Recíproca (TIAR) de 1947. El canciller Rodolfo Nin Novoa dijo que esos países intentan legitimar el uso de la fuerza y, así, derribar al gobierno de Venezuela sin importar la legalidad del procedimiento. La resolución “es violatoria del derecho internacional y, como tal, inaceptable”. “El argumento de la clara amenaza a la paz y a la seguridad en el hemisferio es falaz”.

Los países promotores de la iniciativa rechazaron una enmienda de Costa Rica que excluya la intervención armada. Además, Venezuela no integra la OEA ni el TIAR, “por más que esos mismos países con la connivencia del secretario general de la OEA (Luis Almagro) intenten ignorarlo, reconociéndole los actos a un supuesto gobierno autoproclamado, una legitimidad de la que carece absolutamente”, recordó Nin.

“El argumento de la clara amenaza a la paz se inscribe en la línea de algunos países de la región que han buscado, por todos los medios, forzar una coyuntura en Venezuela que les permita al fin concretar la tan ansiada intervención armada”, agregó el canciller.

Y advirtió: “Lo que sí puede tener consecuencias, además de la terrible pérdida de vidas humanas y el sufrimiento del pueblo venezolano, es una verdadera desestabilización en el continente”, además de agravar “la falta de credibilidad” que tiene la OEA.

¿NADA SE DICE DESDE LA OPOSICIÓN EN URUGUAY?
Ante esta peligrosa amenaza a la paz en el continente, los uruguayos apoyamos a nuestro gobierno, que ha condenado todo intento de invasión. Invasión que sería el mayor castigo a un pueblo que tanto sufre las consecuencias de un régimen dictatorial y del hostigamiento exterior promovido por el gobierno de Donald Trump y sus servidores, entre ellos el nefasto Almagro, que renegó de todo principio y de su patria.

¿Nada se dice desde la oposición? Una oposición que osa cuestionar las credenciales democráticas del FA y de apego a la Carta de las Naciones Unidas. Debería pronunicarse: ¡No ensangrentar a Sud América!